¿Qué pasa con mi bebé? No quiere comer.

Alcanzar los seis meses de edad es un gran hito para el bebé. Es el inicio de los alimentos complementarios. Los padres tienen muchas expectativas e ilusiones para este momento tan esperado. ¡Su primera comida! Muchas veces lo han imaginado y hasta soñado con él, preparan con esmero la ocasión, tienen la silla comedora del bebé, el plato, la cuchara, el lugar donde el bebé comerá, los alimentos que debe comer, se han leído todos los libros de cocina, alimentación complementaria, se vuelven expertos en los diferentes métodos y las diferentes preparaciones y cuando llega el momento tan esperado…el bebé no quiere comer.

La frustración de los padres se siente en el ambiente, la desesperación se apodera de todos, comienzan las maniobras, cantos, saltos, juegos para que el bebé coma y nada, cambian la silla, los platos, las preparaciones de los alimentos y cunde el pánico. El bebé que no es ajeno a todo este barullo sigue tranquilo su vida y solo se ríe de sus padres y cuidadores.

Muchas veces nos olvidamos que la alimentación complementaria es un proceso de aprendizaje progresivo, el bebé que durante seis meses estaba acostumbrado solo a sentir el sabor de la leche, la textura de la misma y succionar, se ve de repente expuesto a nuevos sabores, olores, diferentes texturas y un mecanismo diferente a la succión, la masticación. Esto debemos tenerlo siempre en cuenta. El bebé logrará la experiencia de la alimentación paulatinamente y mientras eso ocurre hará gestos, sacará la lengua, arrugará la cara, tirará la comida, la manoseará y talvez no se la lleve a la boca, pero ninguno de estos gestos es indicativo de rechazo o que no le guste lo que se le ha preparado. Recuerden que es algo nuevo para él.

Son importantes los eventos previos al momento de iniciar los alimentos. el bebé se interesa por la comida cuando ve que sus padres disfrutan alimentarse y observa como ellos muestran gestos de placer y no están distraídos por el celular, televisor o en discusiones desagradables.

La crianza es un aprendizaje continuo.

Frank Ávila Martínez

Pediatra